La Guerra del Oro Negro

Los Piratas del Desierto. 1ª parte

Desde hace tiempo, Estados Unidos y Rusia se disputan el control de las reservas energéticas del petróleo en el mundo. La zona del gran conflicto es la de los países ricos en gas y petróleo que aparecen bañados a las orillas del Mar Caspio.

Antiguamente toda esta zona petrolífera en torno al Mar Caspio era una zona de influencia pro-soviética. Pero en los últimos años, y gracias al desplome del Comunismo soviético, Estados Unidos ha ido tomando la delantera a Rusia y poco a poco ha ido introduciendo su influencia en las repúblicas ex-soviéticas del sur, como Kazakhstan, Uzbekistan y Georgia, y por otro lado, invadiendo directamente los países al sur del Mar Caspio, como Iraq, y Afganistan.

Para apoderarse Estados Unidos del control de esta zona de influencia con recursos energéticos, montó la operación del 11-S, a fín de ganarse la legitimidad y la justificación internacional y de los propios ciudadanos estadounidenses, pudiendo atacar sin ningún problema cualquier país con plena aprobación mundial expresada a través de las Naciones Unidas. El 11-S fué un medio más para ganar la Guerra del Petróleo.

Los asesores de la estrategia estadounidense concluyeron en sus informes que únicamente se podía invadir los países del petróleo mediante un nuevo ataque a Estados Unidos al estilo de Pearl Harbour. El nuevo Plan de Pearl Harbour fué el 11- S.

En realidad la guerra de Afganistán, la guerra de Iraq, y la futura guerra contra Irán, son todas ellas la misma guerra. Observe cómo en el mapa los tres países, Iraq, Irán y Afganistan, van seguidos y están juntos, formando la zona petrolífera en torno al Mar Caspio, que se halla al norte.

Para sacar a los rusos de Afganistán, desde hace ya tiempo, la CIA ayudó a grupos internos de resistencia contra los talibanes como la Alianza del Norte, proporcionándoles dinero y armas, y ha contado con la colaboración del agente de la CIA, Osamah Bin Laden, el cual colaboró también posteriormente en la operación de excusa de los atentados del 11-S, para poder así atacar igualmente a los talibanes radicales, los cuales no atienden a razones ni con rusos ni con americanos. La cuestión era sacar de Afganistán a los rusos, después anular a los talibanes y tomar finalmente el control del petróleo o bien en este caso, del territorio por donde después va a pasar el petróleo.

Al norte del Mar Caspio se hallan unas grandes reservas petrolíferas, en las zona de Kazakhstan y Uzbekistán. Y al este del Mar Caspio se encuentra otra pequeña república de antigua influencia soviética, Georgia, que está alineada con Estados Unidos pero sigue sufriendo contínuos ataques e invasiones militares rusas, por el mismo motivo del control del petróleo en la zona del Caspio.

En Iraq, como ya quedó demostrado ante la comunidad internacional, no había armas de destrucción masiva, que fué la excusa para su invasión. Cuando Iraq y Afganistán estén controlados completamente por Estados Unidos, e Irán se encuentre rodeada y aislada en toda la zona, sólo faltará arremeter contra Irán para completar el control sobre toda la zona petrolífera del Mar Caspio, pues Arabia Saudi y las repúblicas ex-soviéticas ya son aliados estratégicos de Estados Unidos.

Una vez que toda la zona esté controlada, Estados Unidos tendrá la llave de todo el mercado del petróleo, procedente del Asia Central en torno al Mar Caspio, que se canalizaría hacia Occidente a través de varios Oleoductos o Gasoductos. Unos llevarían el crudo por la ruta sur de Afganistán, hasta el Océano Indico, y otros a través de Bulgaria y Macedonia, que llegarían hasta Europa.

En realidad Estados Unidos era ya un país rico en petróleo, con grandes reservas dentro de su territorio o bajo su control, y realmente no necesitan de recursos energéticos ajenos. De lo que se trata es de apoderarse del control del petróleo del mundo, para así evitar que otros países rivales como China o Rusia puedan beneficiarse de los recursos de petróleo de Oriente Medio y que puedan alcanzar un desarrolo mayor que Estados Unidos. Es todo una simple cuestión de estrategia geo-política del control energético en el mundo.

El problema final es la tradicional alianza, hoy en día nuclear, entre Irán y Rusia. Cuando Estados Unidos ataque Irán la Tercera Guerra Mundial, que hace años que empezó en el Mar Caspio, llegará también a Occidente.

Y éste es el otro problema que tiene que ver con las invasiones ilegales que está llevando a cabo Estados Unidos en otros países. El mercado de la droga mueve miles de millones en todo el mundo, por eso los mayores cárteles organizados de la droga salen de los propios gobiernos y de sus servicios de inteligencia, como la CIA. Por ejemplo, de Afganistán sale una gran cantidad de droga que se consume en Occidente. (En la imagen, soldados americanos custodian plantaciones de Opio en Afganistan).

Para más información, una segunda parte sobre este tema podemos encontrar en este mismo magazine, pulsando sobre esta dirección:

España participa en la Guerra Illuminati de Afganistán