Sigue la Operación de Acoso y Derribo por parte del Gobierno socialista y de su Presidente, Zapatero, hacia la AVT.Según informa esta semana la revista Epoca, el Gobierno ha estado infiltrando agentes del CNI dentro de la Asociación de Víctimas del Terrorismo. La AVT, que ha representado la conciencia cívica del país, ha incomodado al Gobierno hasta el punto de haberse convertido en una obsesión para el Ejecutivo.
Durante el ignominioso proceso de entrega de las armas de la Ley por parte del Gobierno socialista hacia la banda terrorista y entrega de fondos millonarios al entramado terrorista, a través de las subvenciones legales a partidos políticos, la AVT ha contradicho al Gobierno y ha sido la voz discordante que ha puesto en evidencia los tejemanejes del Gobierno. La reacción del Gobierno fué hacer la vida imposible al Presidente de la asociación, Francisco José Alcaraz, llevándole incluso al banquillo de los acusados.
La primera operación de voladura controlada de la AVT fué llevada a cabo por el Gobierno a través del nombramiento del Alto Comisionado de apoyo a las víctimas del terrorismo, el socialista Gregorio Peces Barba, un comisario político de triste recuerdo por haber alimentado un espíritu de enfrentamiento de las víctimas del 11-M contra las víctimas del terrorismo. La intención del Comisario era o bien absorver y situar bajo su mando y control a la avt, o bien anularla. La operación fracasó y el Comisario Peces abandonó el escenario político.
Y recientemente, se ha conocido la información de que agentes del CNI, fueron destinados por el Gobierno a infiltrarse de incógnito en la AVT, a fín de espiar todo tipo de información relevante de la asociación, con objeto de desmontar la organización.
Después de todo este tiempo de acoso por parte del Gobierno, la AVT no pasa por su mejor momento. Al parecer, han surgido divisiones en el seno de la asociación, que siembran incertidumbre sobre su futuro.
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