La Marcha diabólica del 22-M

En la Marcha del 22-M, la nueva versión del 15-M Illuminati, hemos podido ver banderas republicanas, defensoras del régimen abyecto, pro-soviético y chekista de la 2ª República, banderas rojas comunistas con la hoz y el martillo, símbolo de los países totalitarios, soviéticos, ateos y genocidas; esteladas separatistas catalanas anti-españolas, radicales vascos separatistas anti-españoles, etc...

Todos ellos tienen algo en común; nadie de ellos desea lo mejor para España y para los españoles; al contrario, odian a España y quieren su destrucción y aniquilación, total y completa.

Sindicatos corruptos engrasados por la Elite Oligárquica, plataformas políticas prefabricadas, y un montón de títeres, lacayos, esbirros y sicarios teledirigidos, que trabajan para la Construcción del Nuevo Orden Mundial. 

Por supuesto, hay gente de buena voluntad, parados, trabajadores, etc... que nutren el grueso de la Marcha para pedir mejoras sociales, pero que, sin darse cuenta, son utilizados por los ingenieros del evento diabólico para su causa.

22-M, múltiplo de 11, con la M masónica y con los dos cuernos, fecha satánico-Illuminati. Los días "satánicos" del mes son el 6, 11, 13, 18, 22, 24, y 31.

El 22-M tenía 2 fases: la 1ª fase diurna de marcha pacífica para pedir justicia social, empleo, etc...
y la 2ª fase nocturna de batalla campal en el centro de Madrid, ejecutada por agitadores profesionales.
Ambas fases forman parte de la misma Farsa.

Los sicarios revolucionarios que trabajan para la Elite del Sistema Illuminati, montan estas marchas contra el mismo Sistema dirigido por la Elite Oligárquica, para romper la nación, crear un vacío, y facilitar así la llegada de un Nuevo Orden Mundial. Es decir, los que montan estas marchas contra el Sistema son los mismos que dirigen el Sistema: la Elite Illuminati y la Orden Negra de El Vaticano S.A. Todo es un Gran Fraude y Engaño.

En el medio quedan los héroes de la jornada, los agentes de la Policía, que como todo el mundo, no saben de qué va la cosa, pero cumplen con su deber de velar por el orden y el bien de la sociedad. 
Mi más sincero y admirado reconocimiento para ellos.
Y mi desprecio para los violentos sinvergüenzas del 22-M Illuminati.