lunes, 23 de septiembre de 2013

No vayas con prostitutas ni consultes con videntes

"Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago de fuego y azufre, que es la muerte segunda". Apocalipsis cap 21 vers 8.

Muchos son los textos de la Sagrada Escritura en los que se condenan la fornicación y la hechicería, tanto en el Viejo Testamento como en el Nuevo Testamento.

La fornicación se refiere a tener relaciones con prostitutas, y fuera del matrimonio; con mujeres que estén casadas, o bien estando uno casado y teniendo esposa.

Es muy ilustrativo el caso de José, hijo de Jacob, que se narra en el libro del Génesis, capítulo 39. La esposa de Potifar, el Oficial del Faraón y Capitán de la Guardia, asió a José por su ropa para que durmiera con ella; entonces José dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió.

Sin duda que José, un joven y apuesto hebreo, se sintió atraído por la bella esposa del oficial egipcio Potifar, pero él que era justo y conocía bien los mandamientos de Yahweh, sabía perfectamente que una relación así no solo habría sido un acto de fornicación con una mujer casada, sino además un acto de engaño hacia su amo y señor Potifar, y un acto de desobediencia a Dios. Por eso José salió literalmente corriendo.

 José y la esposa de Potifar

Despechada la bella esposa egipcia de Potifar, y como acto de venganza, lanzó falsa acusación contra José, para que fuera conducido a prisión. Pero lo que aparentemente resultó una fatalidad para José, al final, se convirtió en recompensa, ya que gracias a que estuvo en la prisión, pudo interpretar los sueños del Faraón, y éste agradecido, le nombró Gobernador y Segundo en Poder en todo el Reino de Egipto, después del Faraón.

También puede parecerle a alguien que las consultas a videntes, mediums, echadoras de cartas, etc... pueden ayudarle a orientar su vida; sin embargo el consultante solo conseguirá confusión, terminar en un callejón sin salida, ser pitorreo para demonios, y perdición.

Hay muchos mandamientos sagrados, pero estos dos, la fornicación y la hechicería, son verdaderamente determinantes y fundamentales, y sus consecuencias no solo se dejarán sentir a largo plazo, en el Juicio Final, sino que también empezarán a afectar en esta misma vida, aquí y ahora.

Si acudes a prostitutas y consultas a videntes, te empezará a ir mal en la vida. Cuando te empiece a ir mal en general, y no te vengan más que problemas, tú no sabrás de dónde vienen o por qué vinieron tantos o tan hondos problemas, pero tuvieron su siembra cuando caíste en dichas transgresiones.

Si quieres que te vaya bien en tu vida, haz como José, y rechaza, huye, y sal corriendo de esas dos prácticas abominables para Yahweh. No dudes. No mires hacia atrás; y mantente firme en lo que Yahweh te manda. Y de seguro que El reconocerá tu buen hacer, y te recompensará, como a José, ahora y en esta vida, mucho antes de lo que pudieras imaginar.

"Buscad primeramente el Reino de Yahweh y todo lo demás os será dado por añadidura". Mateo 6:33.

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